Shizuru, la esperada última HiME...tantas espectativas y sueños que traía consigo, tanto bueno que se podía esperar de ella...y todo tirado al vacio por sus pretenciones amorosas. Resulta que Shizuru no es una chica normal, más allá de lo que pueda aparentar, en el fondo es una chava que sufre tormentos de todo tipo, el más importante, sentir atracción por gente de su mismo sexo, incluida Natsuki. Así pues, la catástrofe que está por cernirse bien podría atribuírsele en parte a Shizuru, quien hará tanto esté a su alcanze por acabar con los enemigos de Natsuki...sin ir más lejos, con Nao y Yukino.

      Yukino es la primera en caer al descubrir el secretito que tan bien guardado se tenía Shizuru. Y es que gracias a su "hijo", espía como el que más, atrapa a Shizuru justo en el momento en que esta, aprovechando el sueño de Natsuki, le demostraba sus sentimientos de la manera más física posible. Con semejante información en su poder, Yukino amenaza publicarla a los cuatro vientos. Claro está que Shizuru no está para chantajes de segunda y en batalla desigual, derrota sin compasión tanto a Yukino como a su "hijo".

     Ya sin Yukino obstruyendo sus planes, ahora solo queda pendiente Nao, y no tarda mucho en deshacerse de tan insignificante muchacha. El par de sacrificios contentan de sobremanera a Kokuyouguu, pero en nada ayudan ni a Natsuki ni a Shizuru. Dos sacrificios más, dos seres queridos que sin intervenir en batalla han perecido y todo por los problemas existenciales de Shizuru. Y es que nada de malo tiene el querer a otra persona, sea hombre o mujer, nada malo hay cuando el sentimiento es puro y sincero. Más sin embargo, Shizuru se niega así misma ese sentimiento, aislándolo de los demás y obligando a Natsuki a compartirlo aún sin su concentimiento.

     Shizuru llegará hasta donde Natsuki le permita, y mientras esta última se arma de valor para afrontar lo inevitable, Mai debe lidiar con la más grande de todas las pruebas que se le hayan impuesto jamás.

     Desde la pérdida de Takumi, el caminar de Mai se ha vuelto errante y solitario. No circula en su mente nada más que la idea de acabar con Kokuyouguu, cualquier otra cosa es secundaria y apenas se percata del hecho de que una a una, las demás HiME's caen a manos de Mikoto o Shizuru. Aún así, el día de la batalla final le está cada vez más cerca...

     Y como especie de preludio, le cae en meras narices Yukariko. Mai descubre el estado de Yukariko, estable y sin ninguna herida, cosa que no debería de ser puesto que Nao la había atacado y por eso dado inicio la batalla entre las HiME. Entonces le queda claro que Yukariko lo ha fingido todo con el único interés de ser la HiME sobreviviente y salvar a su ser querido...porque además de todo, se encuentra en cinta y espera el hijo de un patán que ni siquiera merece la pena ser mencionado.