De mirada perdida, pero provocativa, rasgos finos y delicados, ojos verdes que no disimulan verdades ni esconden mentira alguna, cabello largo y lacio, risos llenos de brillo y de seductora pasión, cuerpo divino, dichoso, incitante. Ver a Kotono es imaginar mil y una cosas, es fantasear con lo prohibido, lo preciado, lo místico, aquello que despierta las más grandes epopeyas, aquello por lo que vale la pena vivir, pelear, sufrir... morir... Lástima... lástima que la calidad media de la serie, no le haya permitido a personajes de esta talla desenvolverse como es debido. Poco, muy poco hace Kotono en la serie,,, y lo que es más, poquísimo se explica de ella, de su pasado, de sus vivencias con Takeru... Quien quedé tan prendado como yo de semejante personaje, deberá buscar no en su anime, si no en sus videojuegos, datos de ella que resuelvan todo el miserio que la envueve.

     Pareciera que olvida lo importante, que deja a un lado lás cosas más valiosas de la vida, por dedicarse a sus retos, a sus pasiones, a sus ideales. Su vida es en gran parte el Kendo, y dedica todo esfuerzo existente en el, buscando superarse a si mismo, y ser el mejor... pero su inocultable humildad se lo impide, y no porque no sea capaz, que capacidad le sobra, sino por indecisión. Sus convicciones, sus sueños aparentemente inalcanzables, sus ideales inalterables porque representan la justicia que en este mundo ya tanta falta hace y la verdad en la que ya nadie cree más, le dan fuerzas para seguir adelante, le hacen fuerte, aguerrido, pero también frio, orgulloso, distanciado, solitario... Mientras su mundo avanza sin descanso, no se percata que detrás suyo le siguen varias chavitas que le buscan, que quisieran conocerle, pero que talvez nunca le alcanzarán, y no porque el tipo busque elevar su orgullo, sino

     Si Takeru es orgulloso, este es más bien caprichoso, celoso, e incluso prepotente y sobrevalorado. Takeru valora a sus amistades, a sus pasiones, a sus retos... este solo le importan sus retos, todo lo demás es pasajero y solo un medio inmundo para alcanzar un fin desdichado, corrompido por todo lo que en el trayecto le ha servido de peldaño. Pareciera justamente lo opuesto de Takeru... pero la realidad es que Takeshi aspira a conseguir lo que Takeru ha hecho, como a su vez Takeru quisiera lo que Takeshi a conseguido. Al final recapacitará, y aunque no dejará a un lado el interés que le representan sus retos, si hará que estas metas suyas cambién de valor, pasándo de caprichos estúpidos e insensatos, a la sobrecogedora presencia de Kotono, en un principio, y finalmente a la apasionada figura de Himiko, ya terminada la serie.

      Hija de Kagutsuchi, y por lo tanto, sucesora y heredera de los humanos de Nenokuni. Es una chavita alegre, despistadona, peleonera, enamoradisa, unas veces perdida de lo que sucede alrededor suyo, otras más preocupona en exceso y sobreprotectora de sus amores y amistades. Es demasiado inocente, haciendo justicia a su niñez, pero carente de la maduréz que las circuntancias establecían. Queda prendada de Takeru así lo conoce, pero no se atreve a decirle lo que siente, temerosa quizás de que Kotono sea una sombra insuperable, y que este lo rechaze por quedarse con la otra... Ni el intento hace por ganárselo... Que pena por ella, soñar es bonito, es sano, es el inicio de las cosas más grandes de la vida... pero sino se le acompaña con lucha, con gallardía, esos sueños se estacan y pronto ocupan inecesario espacio en el baúl de los recuerdos.

     Otra que nos queda a deber, no por culpa suya, sino por culpa de sus creadores. Es una chavita solitaria, mística, calladita, reservada, quizás un poco a la usanza de Kotono, que lo deja todo a la imaginación, que lo deja todo al libre albedrió de las fantasias.

     Quizás tendrá similitudes con Kotono, parentezco espiritual que ninguna negará, pero lo que en aquella es misterio y fantasias, en esta es una maldad muy bien oculta, que espera impaciente a ser liberada, a dar la cara, a mostrarse abiertamente. Junto con Kotono, es por quien vale la pena verse IZUMO, y también por quien amerita una investigación larga, no de este Anime, sino más bien del par de videojuegos que existe de esta serie.

     Hermana de Kotono, pero a diferencia suya, es de lo más abierta, extrovertida, espontanea... Las cosas complicadas de la vida no le importan, no busca complicaciones, busca lo sencillo, lo que tenga fácil concecusión.

     Es dulce, bonita, detallista, y carente de toda maldad. Pero a veces da la impresión de ser excesivamente empalagoza, de esas que hay que mantenerse alejadas, aunque siempre apreciarle y elogiarle esa inocencia y dulcura suya. Pareciera que también se preocupa el montón por Takeru, pero más bien me parece que lo hace intentando emular el actuar de Kotono, y es que bien sabe que un tipo como Takeru no es el que anda buscando, ni el indicado para establecer relación amorosa.

     De esas chavitas agresivas, aguerridas, prepotentes... que representan un reto, y que independientemente de los resultados obtenidos en la disputa amorosa, agradan a la compañía, por su sinceridad, por su insolencia a la hora de hablar, sin negarse la verdad, sin ocultar sus pensamientos más profundos.

     Pero... para hacer justicia a la tradición de las demás... nada hace en la serie, parece querer con Takeru, pero no lucha por conseguírselo. Parece también ser de armas tomar... pero poco interviene en batalla, poco hace por alterar el resultado de la balanza... Y no es culpa suya,,, es que IZUMO fue hecha a prisas, a aventones, y todos los personajes son vivo ejemplo de ello... Lástima, que si otra cosa hubiera sido, IZUMO ahorita sería el boom...

     Como ven, es la creadora de nuestro mundo, y del de los reencarnados, y del de los muertos... es la diosa de diosas (obviamente dentro del mundo de IZUMO), solo que se lo tenía bien guardadito. Solo piensa en ella misma, en lo que la pérdida de su amado Susanaou le ha significado, y en lo que le servirán ambos mundos para conseguir que este vuelva de lado suyo... y hará todo, todo cuanto esté en sus manos por alcanzar de nuevo a Susanou, no escarmentará, ni recapacitará, ni experimentará el menor remordimiento... tendrá que ser el mismo Susanou quien le haga ver el error en el que vive, lo cerrado de su limitado pensamiento, y el triste final que ya de antemano se sabían ambos en esta relación.

     Esta es una de esas veces en que le da a uno coraje verse una serie, que es buena, pero que pudo haber sido mucho, mucho mejor, si se le hubiera dedicado más tiempo a cada uno de estos personajes. Sobre todo, me molesta que Kotono haya sido dejada tan al olvido, tan al abandono, siendo que era merecedora de mucho más en la trama y en el desenlace de la historia. ¡Puñado de segunderos estos, que no han querido darle digno lugar a Kotono-Chan!.

     En fin, igual me ha sido divertido escribirme esta hojita, nos estamos leyendo en la siguiente sección de personajes, ¡Saludos!.

By Seiji Ibiki,10/Marzo/2006

porque solo tiene ojos para Kotono... aunque sincerarse con sus sentimientos es quizás la prueba más difícil que tendrá que librar.