PERSONAJES DE MAGIC KNIGHT RAYEARTH |
No es la clásica protagonista, ni el usual esteriotipo de otros tantos animes... No... Hikaru va más allá, y nos transporta, ella misma, por deseos propios, a una mágica aventura alejada del tiempo, del espacio y de todas esas cosas que en la tierra tanto limitan, tanto gastan, tanto aminoran el ser... Y no solo nos lleva hacia ella, sino que nos transmite en cada palabra, en cada acción, en cada sentimiento, todo lo que mil imagenes y mil series vagamente han intentado. Un sentimiento de entrañeza, de nostalgia... de rememembraza, como aquella que se siente, cuando atrás se mirá y se recuerdan las circuntancias en que se desenvolvió su aventura... o cuando se miran sus vivencias, y renacen las propias, porque no solo su vida avanzaba, sino que también lo hacía la tuya, y una y otra parecían confundirse, perderse, juntas, al caprichoso par del viento, al momentaneo compás del deseo. |
Pero hablar de Hikaru requiere hacer una clara distinción de entre lo que ella fue antes del asesinato a Emeraude, y lo que después decidió ser. Porque si bien la esencia de su ser se mantuvo en ambos momentos, ese preciso acontecimiento hizo un parteaguas en su vida, y nos mostró a una Hikaru enfrentada hacia cosas nunca antes vividas, ni sentidas y este hecho, es, creo yo, lo que termino de redondear esta digna creación. Cuando Hikaru se encontró, sin preeverlo, frente a un mundo nuevo y completamente desconocido, inmediatamente marcó la diferencia de entre el resto, al decidir apoyar al desconocido e intentar ayudar a la princesa y al pueblo sometidos. Esta parte no puede ejemplificar mejor lo que Hikaru era hasta ese entonces, una niña alegre, desinteresada a ratos de si misma, sentimental sin empalagos, muy a su estilo, a ratos determinada a ratos impetuosa, acostumbrada a dar hasta el último esfuerzo por la gente alrededor suyo, a creer en causas que parecían perdidas, y a nunca rendirse, a pesar de que los pronósticos así lo dictaran. Y esa Hikaru, desentendida de sus sentimientos, y acostumbrada a ayudar a mantener los de los demás, fue la nota distintiva durante la primera temporada. Esa impetuosidad suya y animos desmedidos, le llevan a creer en la causa justa de la princesa en peligro y el captor que debe ser eliminado... Pero las mentiras por su propio peso han de caer y al tiempo han de descubrir la perturbadora realidad. Culminado el asesinato, el sentimiento de culpa creció más y más, y a costumbre suya, Hikaru prefirió guardárselo, y evitar a toda costa preocupar a los demás con su situación, con su culpa... con su negación... y es justamente esta pura contradicción, la de mirar por los demás, y no por tí y estando los demás bien, estarás tu bien, la que empieza a mostrarnos a una Hikaru hasta antes no conocida. Ya no hay más sonrisas, ya no hay más impetus... la caida es importante, Hikaru parece estar ahí... pero no está más... parece hablar frente a los demás.. pero su espíritu lo calla todo... Parecer estar rodeada de gente valiosa... pero la soledad le rodea en cada rincón... Y lo que es más, descubre la culpa al tiempo de un nuevo sentimiento ... el amor... Y si la culpa le mina su ser, el amor le termina por tirar, y HIkaru cae, se pierde en si misma, lamentando errores del pasado. Un pasado que no puede ser borrado, porque el tiempo no ha sido creado para borrar viviencias, sino para aprender de ellas, entender sus porques, las causas de cada sacrificio, de cada lágrima derramada, de cada desilución vivida, de cada esperanza depositada en manos que alguna vez creyó eran las elegidas... de cada persona que ahí estuvo, aunque no este más, de cada hasta luego que pudo haber sido el último adios... Intentar olvidar, sin antes haber entendido esto, seguir en el hubiera antes de buscar el habré, es lo que a Hikaru le termina de consumir en profunda división. La división entonces se da, una nueva Hikaru surge de los sentimientos irreconciliables que guarda en su interior, y Nova aparece, no para matar a Hikaru, ni para ser su enemiga... sino para ser ese punto de reconciliación y de equilibrio en el espíritu minado de ambas, porque Nova es HIkaru, y Hikaru es Nova, ambas son una sola, y en la contradicción que ambas representan, está el punto de armonía que una vez reconocido, entendido y aceptado como es, formará a la Hikaru de antes, porque la experiencia ha dado un cambio, una lección valiosa, pero la esencia de Hikaru no ha desaparecido. Hikaru entonces reconoce no solo su sentimiento de culpa hacia el asesinato de Emeraude, sino también su calidez hacia Lantis.. porque ve en Lantis no lo que su apariencia limita a creer, sino lo que es realmente en su esencia... porque no solo intenta conocerle en su frialdad externa, sino que ahonda en su yo interior... y lo hacen tácitamente uno y otro, como se da en estos casos, cuando un par está destinado a complementarse, a quererse, a nunca más separarse. Y la pareja se dá, así sea ya muy al final de la serie, y la Hikaru de antes y la de ahora forman una sola, como Lantis y Hikaru algún día formaran un solo sentimiento. Y es esta relación la que da sabor a la serie, cada episodio, cada situación que se va presentando, van formando un devenir que no merecería mejor final que verle a este par juntos al tiempo.. Y por Hikaru, solo por ella, y aún sabiendo que los demás personajes aportaron enormidades a la serie... por ella me quedo con Magic knight Rayearth. [Continua, Página 2] |