Los ángeles se encuentran preocupados con el caminar de los demonios, así que temiendo lo peor, envían a una de sus jóvenes asesinas, Flonne, a que se adentre a sus terrenos.
Flonne ha sido entrenada por un ángel y su misión no es otra sino asesinar al rey de los demonios, Krichevskoy, pero al llegar a su castillo solo encuentra llamas y confusión.
Total, la angelita no consigue dar con el demonio este por ninguna parte, así que usa el amuleto que le diera serafin (Lanmington-sama) y finalmente da con un vertedero, donde encuentra un ataud con el sello del señor de los demonios.. ¿Será que ahí se esconde el rey Krichevskoy?
Flonee prepara sus armas y abre el ataud. La espectación es grande, sus manos tiemblan, su corazón palpita velozmente y sus ojos quedan fijos en el objetivo.. pero.. al abrirlo aparece Laharl, el principe de los demonios.. gran desilución.
Al parecer, el rey de los demonios ha muerto hace ya dos años, y las tinieblas son centro de una lucha por el poder entre ambiciosos, uno de ellos, Laharl, que se autoproclama Rey por derecho. Así, Flonee decide acompañar a Laharl en su aventura por hacerse del poder, junto con otra demonio, Etna, en un grupo que deberá lidiar con muchas complicaciones y lecciones de la vida, después de todo, no todos los demonios son lo que parecen y la intriga ya está en el aire, esperando entusiasta la participación de Flonee.
