Tazuna narra a los ninjas de Konoha los eventos que llevaron a que la gente de la isla dejara de creer en la valentía.

Fue hace unos 3 años cuando Inari conoció a su padre, un conocido héroe del lugar. Ocurría una clase de injusticia infantil, cuando unos ñinos tomaron el perro de Inari y lo arrojaron al mar. La desesperación era doble, primero porque los niños eran unos abusones, después porque Inari no sabía nadar y con dolor, sabía que tenía que dejar a su suerte al que consideraba su mejor amigo. Pero la treta fue mas lejos, los niños, no conformes, arrojaron a Inari al agua y lo dejaron ahogarse.

Al final el perro pudo escapar y fue Inari quien cayó inconsciente, pero al despertar, se percató que un sujeto de la zona lo había rescatado, un tal Kazai. Es cierto, no era más que un pescador, pero las palabras que recorrían su forma de ser impactaron al pequeño: "Si eres un hombre, elige una vida sin remordimientos, y aquello que sea importante para tí, no importando lo duro o triste que sea o si te cuesta la vida, debes protegerla con ambos brazos".

Las ideas de Kazai permearon no sólo en Inari, sino en toda la aldea y de pronto se convirtió en la esperanza de mucha gente, en el héroe que necesitaban. Los salvó de una inundación, les brindo una nueva oportunidad, les dió ánimos de lucha y progreso, muchas cosas cambiaron durante su protagonismo, sin embargo, el día que Gatou llegó a la isla, lo asesinó públicamente haciéndolo pasar por un terrorista. Así, Inari dejó de creer en héroes, porque el hombre más importante en su vida, había fallado en cumplir su promesa.

La historia es corta, pero el mensaje es rotundo y ha llegado a los oidos de Naruto, que siente fuertes deseos de seguir entrenando para demostrarle al pequeño Inari que los héroes existen.